Enigmáticos

…Qué linda palizonga le dio a “Zapping” a TVR el sábado por la noche ¿no? El ciclo de Telefe se impuso al de Canal Trece afirmándose como líder en el rubro de resúmenes televisivos. Algunas cosas algunas, hablo en capicúa hablo que quiero destacar del ciclo de Dieguito Gvirzt, el paladín de las contradicciones: Los dos muñecos que están ahí presentando informes sentaditos, duros como estatuas, cada emisión que pasa, demuestran sus falencias, no saben qué hacer ni qué decir cuando un invitado les tira de los huesos, como sucedió con Alfredito Casero la última jornada cuando Sebas y Gaby le tiraron baldes de caca al recién fallecido Bernardo Neustadt. Ni el actor ni el periodista son santos de mi devoción, quiero dejarlo claro, pero éste par de esclavitos del malvado Dieguito, ya no tienen defensa, se meten hasta con los muertos. Una vergüenza. Y no me vengan con qué es un homenaje. A mí no. Opinen con respeto.


…Silencio dijo el cura, silencio dijo el juez, silencio entonces idiota, silencio entonces, ¡ah! Escuchando este tema de “Bares y Fondas”, el primer LP ochentoso de los Fabulosos Cadillacs me inspiré para contarles acerca de la amenaza que recibí hace horas, vía mail. Un anónimo, como siempre en estos cobardes actos, me advertía con muy malos modales que no volviera a mencionar nada que tenga relación con el ex novio de una conocida vedette en ascenso. La verdá es que no comprendo, jamás conté nada de él, podría hacerlo, pero para que voy a contar que el tipo es el cuñado de un groso jugador de fútbol oriental y además que mientras salía con la rubia pulposa, su jermu se quedaba al cuidado de la familia esperando al maridito ideal que en realidad es un flor de hdp. No me provoquen porque alguno termina enterrado y les aseguro que mi vida es muy ordenada. No le tengo miedo a nada. ¿Ok?

…Hoy me desperté temprano, lo primero que hice fue ingresar a mi MSN y una amiga de la vida me había dejado un mensajito bastante peculiar. El mismo decía algo así: “Me contó un amigo que tuvo un encuentro sexual con M… (actor) y que éste, mientras le daban dureli dureli, reclamaba con un grito desenfrenado de llamame Marcela”. Por supuesto, como no entendí nada, la llamé y le pregunté si estaba en dope o qué. Hete aquí que la muy villana me aseguró lo siguiente: El actor M, cuando tiene encuentros sexuales con otros hombres (nada nuevo en el medio, todos sabemos que tiene mucho vértigo en varias zonas de su cuerpo), les pide que lo llamen por el nombre de Marcela. Say no more!

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